17.3.12

La realidad es un juego de percepciones.

En el fondo no somos más que desconocidos, la cara oculta que nunca mostramos, las frustraciones que jamás reconoceremos.
Nos plantamos ante el espejo para no ver absolutamente nada. De apariencias es de lo que nos alimentamos, vivimos a base de ellas, de mostrar la cara buena de la moneda,  de fingir realidades, de engañarnos a nosotros mismos.


A veces lo importante no es lo que decimos, es lo que nos callamos, lo que ocultamos al mundo.